Pues un poco tarde esta vez, pero vamos allá con lo que ha dado de sí esta cuarta semana del reto…
Ha sido una semana muy complicada, y mi peor enemigo, mi cabeza, me ha jugado una mala pasada.
El estrés en el trabajo ha hecho que llegara tardísimo a casa y con mil cosas en las que pensar, lo cual desvió mi atención a la dieta, llegando incluso a olvidarme la comida uno de los días…
Además, el fin de semana no lo arregló mucho, comiendo algo de porcallada y mucha cantidad de comida, real, pero mucha cantidad. Además este fin de semana no hice deporte, solo caminé un poco en la cinta el sábado (review en breve) y el viernes hice cacos (caminar-correr) también en la cinta.
El resultado… pues negativo y frustrante. Pero como me decía mi preparador… no todo va a salir siempre bien, somos humanos. Y esto es así, cuando empecé sabía que no iba a ser un camino de rosas, que tendría caídas y habría que aprender a levantarse, y no quedarse en el suelo y arrastrarme a las profundidades como he hecho hasta ahora siempre que me he puesto a dieta.
Seguimos en la lucha, pues, con una toma de pesos a día de hoy, miércoles, bastante ilusionante. Volvemos a seguir bajando y eso es lo importante.
Eso si, cumplir con el reto de febrero se empieza a antojar bastante complicado…
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Peso inicial (semana 0): 94,6kg
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Peso objetivo de este mes: 88,9kg
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Peso objetivo: 73kg
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Peso semana 3: 88,9kg
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Peso semana 4: 89,6kg
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Evolución: +0,7kg
Pues lo dicho, pequeño traspiés que intentaremos paliar de la mejor forma posible, haciendo las cosas bien e intentando meter un poco más de deporte.
Esta semana creo que el fin de semana jugará un papel importante. Si consigo hacer las cosas muy bien, siguiendo las pautas nutricionales a la perfección y metiendo deporte intenso y de calidad los dos días, llegaré al lunes con un peso, nuevamente, ilusionante.
Let’s go!!